Sentido y Sensibilidad en el Arte.

El vínculo existente entre el arte y los sentidos existe desde siempre.”El arte es la creación de formas sinbólicas del sentimiento humano” (Collingwood). El artista nace y desarrolla los sentidos y la sensibilidad para crear arte, esto incluye una relación íntima entre los sentidos y el objeto.

Al hablar de los sentidos que influyen en la creación de la obra por el artista, hablamos también de sentimientos que se plasman en la misma. Es importante dejar a un lado la mecanización de lo aprendido en academias para que fluyan los sentimientos utilizando herramientas como el oído, el tacto, etc. Es por este motivo por el que relacionamos el arte con los sentimientos y el arte con los sentidos.

Si partimos de la premisa de que la obra de arte es el reflejo de lo que íntimamente piensa el artista, sus vivencias y sentimientos, ese mundo interior lo incorpora a la obra como su principal punto de partida para crear.

Para poder empezar a ver y a entender el arte debemos aprender a sentir todo aquello que nos remueve y aflora sentimientos cuando visualizamos una obra y que previamente ha sentido el artista al crearla.  

La Pintura y la Sensibilidad

A través de la pintura logramos percibir diferentes sentimientos dependiendo del artista al que estemos viendo. El pintor y su obra deben lograr transmitir la sensibilidad, la comunicación, la creatividad, y aumentar la capacidad de ver más allá de unas formas y un lugar.

Hay artistas que pueden realizar obras de arte técnicamente impecables con una mínima sensibilidad dando lugar a obras de calidad. Pero al verlas se echa de menos la calidez y creatividad que afloran en los artistas que trasmiten la sensibilidad artística.

En el proceso de aprendizaje de un pintor se enseña la técnica que debe tener un cuadro. Pero si en ese proceso se omite sacar a flote la sensibilidad del pintor y unirla al proceso de la técnica tendremos una obra carente de verdad. Un artista sin sensibilidad no es un artista completo.

La técnica le da forma a la obra y la sensibilidad culmina la perfección de la misma.

El Arte como técnica Inclusiva

El arte es la actividad más inclusiva que existe, es en sí el compañero perfecto de la discapacidad.  El arte se expresa, a través de las todas las artes sin necesidad de verlo ni oírlo, además no hace distinción de si el artista tiene o no una discapacidad, abarca a todos.

El arte tiene un poder sanador, además aumenta la capacitación y habilita un espacio de creación y comunicación desde lo intimidad de cada artista. La inclusión de las personas con diferentes capacidades en actividades artísticas aflora múltiples beneficios tanto para ellas como para la sociedad. Además suscita entre los artistas la autonomía, confianza y asertividad.

El arte permite desplegar la imaginación, potencia la autonomía y beneficia la integración; es uno de los mejores vehículo de expresión.

Estas son algunas de las piezas que despertarán vuestros sentidos y vuestra sensibilidad y que podéis encontrar en Adjudicarte, pero tenéis más en nuestra web